En el Salón de Plenos del Ayuntamiento de
Águilas y coincidiendo con la víspera del Día Mundial del Turismo, se celebró el
tradicional acto con el que el Consistorio aguileño reconoce, cada año y de manera pública, la
apuesta turística que realizan ciudadanos
y empresas del municipio.
El alcalde de
Águilas, Bartolomé Hernández, y la concejal de Turismo, Clara Valverde,
acompañados de otros invitados, presidieron la cuarta edición de la entrega de
estos galardones que premian la trayectoria profesional y la innovación en el
sector turístico.
A lo largo de estos años, ha obtenido varios reconocimientos y ha organizado multitud de eventos y pruebas deportivas, tanto de ámbito regional como nacional, y sus regatistas han sido campeones de España y del mundo. Algunos de los valores más importantes que ha aportado a la sociedad, han sido la educación y el cuidado en la preservación del medio ambiente, consiguiendo el distintivo de Bandera Azul desde el año 1993 hasta la actualidad.
De la misma forma, en colaboración con el Ayuntamiento de Águilas desarrolla campañas como: Ningún aguileño sin navegar, Ecoescuelas Litorales o Cuidando el mar, con el objetivo de incrementar entre los ciudadanos la pasión y el respeto hacia el entorno en el que vivimos.
En este 2014 se le han concedido dos importantes galardones, uno otorgado por la Comunidad Autónoma de Murcia ‘a las iniciativas de educación ambiental para ciudadanos y consumidores’ y el otro concedido por la empresa Hempel ‘a la calidad y al servicio en la náutica’.
Por último, el Club Náutico acaba de obtener una nueva concesión sobre el puerto deportivo, lo que les va a permitir seguir prestando sus servicios a la sociedad aguileña, como ha venido haciendo hasta hoy.
La otra distinción concedida por el Consistorio aguileño, en este caso para premiar la apuesta por la innovación turística, fue a parar al Camping Bellavista, un negocio regentado desde el año 1992 por Antonia Granados y su familia.
Granados es una mujer autodidacta, valiente, trabajadora y con gran capacidad de superación, como lo demuestra el hecho de estar 22 años al frente de un establecimiento que permanece abierto los 365 días del año.
Durante todo este tiempo, no ha dejado de hacer mejoras en sus instalaciones, ni un solo año, con la finalidad de que sus clientes se sientan más cómodos y con mayores servicios. Las últimas reformas han sido la construcción de: pistas de petanca, circuito saludable, piscina, jacuzzi y terraza-bar.
Actualmente, en la empresa trabajan seis personas fijas, aunque en temporada alta llegan hasta las catorce. Además, Antonia cuenta con la inestimable ayuda de su hija María Jesús Rabal, encargada de dirigir el camping junto a su madre y responsable directa de muchas de las innovaciones a las que se somete este bello lugar cada anualidad.
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